SÁBADO 26 DE MAYO DE 2001 - La planta fabril de la firma Massey Ferguson, que cerró sus puertas en septiembre del 1999 a raíz de una quiebra, podría volver a funcionar si la justicia rosarina acepta una propuesta de reactivación presentada por un grupo de empresas. La presentación consiste en hacerse cargo del pasivo del establecimiento, cuyo monto es cercano a los 8 millones de pesos.
La oferta, efectuada por la asociación de las empresas Bonifacio Rodríguez e hijos, de Venado Tuerto, y Wander Lubricantes, de Granadero Baigorria, permitiría reactivar el establecimiento con la futura producción de tractores, retroexcavadoras, diferenciales y cajas de velocidad de máquinas de más de 100 HP que la firma Ursus Latinoamérica colocará en los mercados de Brasil y Polonia.
La propuesta fue presentada en el juzgado Nº 13 de Rosario y consiste en abonar las deudas fiscales a la Administración Federal de Impuestos (AFIP), pagar las indemnizaciones de los trabajadores despedidos y tomar parte de los 250 obreros que quedaron desafectados de la empresa.
Los detalles fueron dados a conocer a La Nación por uno de los titulares de la firma Bonifacio Rodríguez, Sergio Rodríguez, que se reunió junto a los socios de la empresa, ex operarios de la planta, representantes del sindicato de mecánicos (Smata) y de la empresa Wander con el gobernador de Santa Fe, Carlos Reutemann.
"Creemos que la Justicia nos debe dar una oportunidad porque pretendemos abrir una fábrica. Determinar su remate significaría el desguace del establecimiento. Además, en Polonia y Brasil nos solicitaron 800 tractores y retroexcavadoras, cifra que se duplicará el año próximo", dijo Rodríguez, con los pedidos de compra en la mano.
El empresario aclaró que la firma Ursus en Polonia sólo produce máquinas menores a 90 HP y que, ante la aparición de un nuevo mercado de máquinas más potentes en países vecinos de la ex URSS, tomaron la decisión de importar. Aclaró, además, que la nueva empresa estará en condiciones de fabricar cajas sincronizadas de doce marchas.
Bonifacio Rodríguez era proveedora de cabinas de tractores de la firma Massey Ferguson, de Granadero Baigorria, y también de Brasil, mercadería que dejó de vender debido al desfase de precios que ocasionó la devaluación de la moneda brasileña. En el momento de quebrar la fábrica venadense no pudo cobrar sus acreencias, calculadas en 250 mil pesos.
Rodríguez aclaró que el grupo de empresas que quiere hacerse cargo de la planta posee capital suficiente como para comenzar a producir para el mercado externo e interno, y que pidió un plazo de entre cuatro a cinco años para pagar la totalidad de la deuda fiscal que dejó la empresa en su anterior administración.
Ursus tiene su base en Polonia, pero en Brasil la compañía toma la denominación de Ursus Latinoamérica. La planta está en la ciudad de Caxia do Sul, 160 kilómetros al norte de San Pablo y actualmente es administrada por la familia Guerra, competidora en ese país de la empresa Randon".
Walter Gasparetti
