sábado, 25 de enero de 2014

GEMA

Cuyas siglas eran Grandes Establecimientos Metalúrgicos Argentinos S.A. fue una fábrica de cosechadoras con asentamiento en Rosario, que estaba instalada en la zona oeste de Rosario (Eva Perón y las vías del Ferrocarril General Bartolomé Mitre) y fundada en 1943.
Representó y trajo las sembradoras Riboulleau con su sistema "Monosem", que funcionaba por succión. La turbina, al revés de Hummel, extraía el aire y de esta manera la semilla se pegaba al alvéolo pero desde el lado opuesto. Al salir al aire, caía. Después todas las fábricas lo fueron incorporando, y con diseños nacionales.

GEMA fue conjunción de dos antiguas empresas rosarinas: Torres y Valenti S.R.L. y Baronio y Melquiot S.R.L., siendo más antigua la primera ya que fue fundada en 1910. Don Luis Valenti, gran precursor de la firma, volcó toda su experiencia industrial en la nueva empresa y Melquiot fue la figura señera en la maquinaria agrícola de su concepción llevando su sello como garantía de eficiencia tan apreciada en las chacras argentinas. La nueva planta industrial instalada en Av. Córdoba 5856, Rosario, produjo durante muchos años máquinas herramientas "GEMA" para industrias y en el rubro agrícola se destacaron las máquinas desgranadoras de maíz modelo 8 T, las enfardadoras de paja de trigo automotrices para la empresa Celulosa Argentina, y las cosechadoras automotrices mod. M40, todas ellas identificadas con la marca "Gema sistema Melquiot".
En los finales de los 50' y comienzo de los 60', 380 obreros trabajaban en sus talleres que cubrían 15000 m2. de superficie, produciendo cosechadoras (unas 350 unidades anuales), contando para su distribución y ventas con importantes agencias y concesionarios distribuidos en las más importantes zonas agrícolas del país.

Actualmente, en esos mismos terrenos que antes acunaban a más de 700 trabajadores metalúrgicos hoy se levanta el complejo de Cines Village, el supermercado Carrefour, de capitales extranjeros y a 1 cuadra, la cadena de comidas rápidas Mc Donalds.

“Esta fábrica fue la primera en el mundo en producir máquinas agrícolas, cosechadoras, trilladoras”, “Aca la máquina era muy buena porque tenía dos limpiezas. Ahora creo que viene con una sola limpieza. Esto equivale a que el cereal se limpiaba 2 veces. Uno tiene que pensar que la máquina es cómo una fábrica”, agrega, mientras explica todo el sistema de trilla con una fascinación que contagia. Alguien dijo, alguna vez, que el trabajador metalúrgico lleva su oficio en el alma. A Pachuco se le nota en cada gesto, cuando mira con nostalgia el almanaque antiguo de la GEMA o la foto en blanco y negro en la que se lo ve junto a sus ex compañeros de trabajo. “El gordo Perez era un hippie adelantado”, recuerda entre risas. “Venía con los pelos largos y los pantalones hecho girones”. Con dignidad, Pachuco defiende la historia de esa fábrica a la que le dejó casi toda una vida, orgulloso de contar cómo se trillaba el cereal por aquellos tiempos.

Guillermo, por su parte, trabajó durante más de dos años. Ingresó a los 14 cuando apenas terminaba la escuela técnica de la Nación Nº 40. “Nosotros salíamos de la escuela fábrica de la Nación, con un 3° año, que sería un experto, y la fábrica estaba conectada con la escuela. Era como una continuidad”. Según Pachuco, más del 50% de la “gente grande” ha entrado como aprendiz, porque “recién comenzaba a haber trabajo”. Los 2 coinciden en que la fábrica cobijaba a sus empleados siguiendo un estilo paternalista, un modelo fabril que parecía implementarse, más allá de GEMA. “Yo entré cuando había perdido a mi padre. A los 14 años uno empieza a crecer ahí. Y entonces, los oficiales lo cobijan como si fuera hijo de ellos. Yo me crié ahí adentro”, dice Pachuco.

“Había mucho compañerismo”, expresa Guillermo, revalorizando los lazos sociales que las fábricas, en su conjunto, supieron construir, sobretodo durante los años del peronismo, como afirma Pachuco. “Antes no había ninguna protección para el trabajador”. También destacan, los 2, la importancia de contar en esos tiempos, con una fuente de trabajo al terminar la escuela técnica. Ahora “están las pasantías”, sentencian.
Imagen de la fábrica (Córdoba y Rouillon)

El ritmo: La gran mayoría de los empleados de GEMA eran los propios vecinos del barrio. A ellos cobijaba durante las noches y las madrugadas, cuando sonaba la infaltable sirena anunciando la entrada a la fábrica. El ritmo de trabajo era de turnos de 4 horas y había, como en toda fábrica, diferentes secciones. Todo un corazón fabril latía en barrio Azcuénaga y la mayoría de los vecinos apelo a ese latido para poder sobrevivir. Cuando cerró, algo se detuvo en el barrio a pesar del aturdido sonido de alta fidelidad que actualmente ofrece el complejo de cines Village. El mismo sonido que Pachuco dice no poder soportar.

Guillermo señala, nuevamente, el vínculo de la fábrica con la escuela. “Cuando terminábamos el ciclo básico, después íbamos de noche. Entonces, la empresa GEMA nos dejaba salir una hora antes para que llegáramos a tiempo a la escuela para que siguiéramos el ciclo técnico de noche”. Además, a medida que se avanzaba en los años de escolaridad, el sueldo aumentaba. “La fábrica nos iba aumentando el sueldo cada año, eso era por ley”. Y agrega Pachuco “los chicos que se recibían de técnicos ocupaban cargos ahí”. En las escuelas técnicas se hacía la parte teórica y la parte práctica, destaca Guillermo. “La empresa misma se ocupaba de garantizar la educación del trabajador”.

Por otra parte, en el barrio se logró levantar el club Tucumán gracias al aporte invalorable de la fábrica. “Acá en el barrio tuvimos un gran beneficio con GEMA, porque acá teníamos un club de barrio que no era nada. Pero cuando GEMA necesitó más espacio compra todo y le ofrece al club un terreno que es donde actualmente está. Entonces cuando se funde, yo conozco mucha gente que lo sintió mucho por esa causa”, expresa Guillermo quien recuerda una anécdota particular, casi como un aprendizaje de vida. “Teníamos un capataz que no me dejaba aprender a soldar. Así todo, yo aprendí a soldar. Acá en Gema se fabricaba en una época unos cilindros grandes que tenían ejes donde ponían los rayos. Los soldadores ya lo habían soldado todo, pero se habían olvidado de soldar adentro del tambor. Para soldar allí dentro tenías que ser chico, y uno de los soldadores dijo “por qué no lo mandas al pibe”. El único que entraba entre los rayos del tambor era yo, y el capatáz me tuvo que llamar a mí.”
AGENTES Y CONCESIONARIOS: distribuidos por la provincia de Santa Fe (Mazzoni y Taormina, en Santa Teresa), Buenos Aires y Córdoba, entre otros.

El cierre: en 1992 se produce el cierre de la fábrica, construida al calor de la década del 40'. Así lo recuerda Pachuco. “Perkins nos traía camionada de motores en la época de auge y se ve que endulzó al hermano del viejo Valenti. Entonces, le dio un montón de motores y la fábrica no pagaba. En un momento determinado Perkins se quedó con la fábrica porque los ingleses no son tontos. Asi que, se quedaron con la fábrica. Después vino un tipo que le puso un montón de bondades a la fábrica, después del 70', pero la mayor cantidad de acciones la tenía Perkins. En un año determinado se la dio a 4 fascinerosos que la trabajaron durante 4 años, sacaron créditos y no pagaron más y la fábrica quebró. Yo lo escuche en una reunión que teníamos “fulano si no le pagamos la máquina que debemos no nos dan más cabida.” Después, la fábrica fue rematada con todo su capital por “$1300000”, recuerda Pachuco. “Yo al principio no le creía”, dice este hombre de 75 años quien defendió su fuente laboral hasta el último día. “Yo me puse mal cuando empezaron a derrumbar los galpones”, ubicados detrás de la cuadra donde Pachuco vivió toda su vida. Los vio construirse lentamente y hasta puso manos a la obra en las canaletas de esos mismos galpones. Después, le toco la triste hora de verlos caerse a pedazos.

Sin embargo, antes del derrumbe, Pachuco apelo a la fotografía para retener algo de lo rematado por un puñado de pesos que nada compensa a los cientos de trabajadores que quedaron en la calle. "Muchos de ellos terminaron trabajando en estaciones de servicio o en otro lado”. Esa foto muestra la torre de Gema con su símbolo, la G con las espigas de trigo y la República Argentina en su centro.

Foto: Facundo LU6FPJ

GEMA producidas en Argentina

MODELOS PRODUCIDOS
 
GEMA GM-53
GEMA HG-16
GEMA-Melquiot M-40
GEMA-Melquiot
GEMA B8
GEMA 90
GEMA 1000

jueves, 23 de enero de 2014

Rotania

Don Alfredo Rotania, llegó a la Argentina junto a sus hermanos en el año 1911, radicándose en Sunchales, Santa Fe e instala un taller de maquinas agrícolas en la misma localidad para atender las necesidades de la zona, se asocian sus hermanos, Miguel, Fernando y Enrique, dedicándose entre los años 1920 a 1930 a la reparación de maquinas agrícolas, motores y autos Rugby y Durant junto con la fabricación de elementos para maquinas trilladoras de vapor (en 1923 con la invención de un tubo lanza paja que se anexaba a las trilladoras a vapor), a su vez se dedicaban a la explotación de este tipo de maquinas trillando parvas de trigo y lino, llegando a tener cuatro equipos, siguiendo después con la fabricación de maquinas corta trillas de arrastre a caballo o a tractor. Esta experiencia da origen a que estas máquinas podrían desplazarse por sus propios medios.
Don Alfredo comienza sus experimentos en 1927, consiguiendo su propósito al crear una maquina llamada "Espigadora-Trilladora con adaptabilidad de un tren automotriz en el rodado delantero”.
El 18 de diciembre de 1929 crearon la primera cosechadora autopropulsada del mundo, certificada bajo las patentes de invención Nº 32397 y 35472. Utilizaban su propia fundición. Además los saca pajas, los cabezales para maíz y girasol eran marca Rotania.
La primera cosechadora automotriz del mundo se hizo en Argentina. La invención ofrecía motor Hércules y diferencial Chevrolet. La misma hoy reposa en la ciudad de Sunchales, como recuerdo de la gran invención que crearon estos gringos, quien lo diría, de Sunchales para el mundo, de la Argentina para el mundo. Del matrimonio Rotania-Panero nace Enzo Rotania.
Enzo fue presidente de Rotania muchos años, y además fue el creador de la Rotania Nº 8., marcando así el fin de la tracción a sangre en los trigales. La marca Rotania alcanzó meritorio prestigio en los campos de la Argentina y en otros países sudamericanos a través de millares de unidades producidas, llegó a tener más de 400 empleados en la planta de 16000 metros cubiertos.
La venta funcionaba a través de créditos bancarios. Los lugares de venta mas comunes eran Córdoba, La Pampa y Entre Ríos, dentro del país.
La empresa Rotania Hnos. fabricó elementos muy importantes para el desarrollo de la época, dentro de sus invenciones y desarrollos podemos mencionar la máquina para cortar barras de manteca para la empresa Sancor, tractores, motoniveladoras, autohileradoras, niveladoras de arrastre, plataformas recolectoras de maíz, equipos poroteros, equipos sojeros y molinos de viento.
En 1956 la fábrica pasó a ser propiedad de los hijos de los fundadores, quienes siguieron la tradición. Produjo maquinarias para el país a través de más de 60 concesionarios, y también para Brasil, Uruguay, Paraguay, Venezuela, Bolivia y República Dominicana.
Desgraciadamente, la política de apertura indiscriminada de importaciones impulsada en la década de 1990 hizo que esta empresa tan importante deba cerrar sus puertas después de años de prestigio.
Hoy, la alemana Claas ocupa el predio de La Rotania en Sunchales y ha mantenido parte de la historia de Rotania.

MODELOS FABRICADOS
Autihileradoras H3 con plataforma a caracol o lona.
Motoniveladoras M4 de 14 TN, M3D de 12TN.
Motoniveladora de arrastre, N1.
Tractores Supremo 30, M2 de STN.
Picadoras de forrajes integrales, tres modelos.
Tractores articulados 200 y 200/160
Cosechadoras automotrices NSC 16 pies. N8 S/C.
Cosechadoras automotrices N8 SC 15 pies, N8 S7S.
Cosechadoras automotrices Posi 4 Trac DT (para arroz).

martes, 21 de enero de 2014

Araus

En la localidad de Noetinger, Córdoba, se instalan con un taller los señores Araus Hnos. para fabricar máquinas cosechadoras de cereales y juntadora de maíz automotrices. Sus comienzos en la mecanización agrícola se inician en la localidad de Armstrong, provincia de Santa Fe, cuando los hermanos Julián, Romualdo y Tomas Araus, en su chacra, se dedicaban a reparaciones de máquinas, siendo en el año 1942 que construyen una cosechadora automotriz con satisfactorios resultados.
Años después (en 1948), ya instalados en Noetinger emprenden la fabricación en serie llegando años después a ser una de las más importantes fabricas del país.
Durante la década del 70' y principios de los 80's, llegó a exportar cosechadoras (como se puede ver en la imagen de la derecha).
CREACIONES además de los pulverizadores tan particulares y cosechadoras (junto con un prototipo de cosechadora de porotos probado en campos de Rosario de la Frontera, provincia de Salta), la empresa diseño y construyó un modelo de zanjadora para viñedos a cadena y también un vehículo utilizado para la zafra con dirección hidro, este fue aplicado también en actividades forestales y petroleras.
CAMBIO DE ÉPOCA a inicios de los 90's y específicamente en 1992, los dueños de Araus aceptan la adquisición de parte de Deutz Argentina S.A. quedando el 70% en manos de la filial local de la multinacional alemana y el resto en manos de los dueños originales. Así, pasó a usar exclusivamente motores Deutz durante cierto tiempo, su nombre cambió a Araus-Deutz, usando el clásico color verde de esta última ya que había sido comprada por la filial local de Deutz en Argentina y posteriormente cerrada por AGCO Argentina S.A. en 1999 en medio de una recesión económica galopante.
DEL CIERRE A METALFOR tras la desaparición de Araus, en 2003 METALFOR adquiere la planta industrial perteneciente a la firma Agco Argentina S.A. (Ex Araus), la misma cuenta con una superficie total de 60.000 m2 y 15.000 m2 cubiertos.
Trasladó toda la producción de equipos de arrastre, frutales, agro partes y además crea su primera cosechadora Metalfor modelo “Araus 1360”, así quedando el nombre "Araus" unicamente como modelo nomás de Metalfor, aunque también usado como submarca llamándose así Metalfor-Araus para los productos fabricados en la planta de Noetinger.
ADIOS A ALICIA, EL ULTIMO MIEMBRO DE LA FAMILIA ARAUS en Junio de 2015, fallece Alicia Araus (foto, a la izquierda), quien era sucesora de los hnos. Araus.
RECONOCIMIENTOS mientras que el sábado 10 de junio de 2017, el Intendente Municipal, Autoridades, Banda de Música Municipal, representantes de Instituciones y Empresas, familiares y amigos de Alicia Araus, vecinos del Barrio Amanecer y público en general participaron del sencillo y emotivo Acto de Oficialización de la Calle 12, que se denominó Arquitecta Alicia Araus.

http://www1.hcdn.gov.ar/proyxml/expediente.asp?fundamentos=si&numexp=7283-D-2006

http://www.agroterra.com/foro/foros/maquinaria-agricola-f13/maquinas-de-argentina-brasil-y-sudamerica-t18590-24.html#p462788

MODELOS FABRICADOS
Araus A-152 / A-252
Araus 350
Araus 380 DT
Araus 410
Araus 400
Araus 500
Araus 505 DT / 505 DTH
Araus 510 XR
Araus 510 Gigante
Araus 530-Gigante/2
Araus 610
Araus Máxima

domingo, 19 de enero de 2014

AGCO

AGCO Argentina S. A.
Para hablar acerca de la marca AGCO, hay que retrotraerse a la instalación de DECA S.A. (Deutz-Cantábrica, fusión entre KHD y La Cantábrica) la cual se establece en la localidad de Haedo, Provincia de Buenos Aires fabricando la línea de tractores Deutz, Deutz-Fahr y Deutz-Allis, las cuales también tendrán su espacio aquí.
El uso del nombre AGCO-Allis data del año 2001, reemplazando a los Deutz-Fahr, manteniedo el característico color verde, aunque la producción en la planta de Rosario comenzó en 2006. Cabe aclarar que la planta rosarina es propiedad de Baden SA, ubicada en Juan B. Justo 7494, la cual realiza corte plegado planchado de chapas, cabinas para máquinas agrícolas y tractores además de línea de producción y montaje final.

Producción local y modelos la producción de los tractores AGCO Allis Serie 6.A incluye los modelos 6.110, 6.125, 6.135, 6.150, 6.175, 6.190 y 6.220, abarca desde los 110 HP a los 212 HP de potencia. Dicha producción es un proceso integrado de las plantas industriales de Haedo (provincia de Buenos Aires) y Baden, ubicada en Rosario (Santa Fe). La Serie 6.A está equipada con los motores Deutz 913 de renovado diseño, enfriados por aire. El motor cuenta con importantes avances en los sistemas de inyección y combustión lo cual destaca su notable tradición de bajo consumo, sin importar el nivel de carga del motor.
Tras casi una década de importar productos desde Brasil, Francia, Estados Unidos y otras latitudes, e instalada en 1996 en Argentina, inicia su producción nacional de tractores en 2006, bajo la marca Agco Allis a través de un Joint Venture con la empresa Baden, de Rosario. El tractor posee un contenido nacional de alrededor del 80% y es el de mayor integración del país. En la Argentina emplea a 150 trabajadores.

2006: Comienzo de la producción Agco Argentina S.A. comenzó la producción de sus tractores Agco Allis Serie 6. de alta potencia en nuestro país. El anuncio se hizo el miércoles pasado. El acto contó con la presencia de Felisa Miceli (Ministra de Economía), Miguel Peyrano (Secretario de Industria de la Nación), André Rorato (presidente de Agco Allis), Ricardo Turatti (gerente de Márketing de Agco Argentina) y José Luis Morena (gerente de Ventas y Márketing de Agco Allis). El programa de fabricación para el 2006 contempla 390 unidades de los cuatro modelos de la Serie 6 de Agco Allis, que se elaborarán en la planta industrial de Rosario, representando una facturación de $ 73000000 (60% del total de los tractores de la marca). La empresa estima duplicar este volumen en los próximos dos años incursionando en nuevos mercados fuera del país, básicamente en América del Sur.

La producción de las unidades, su comercialización y la atención posventa de estos tractores involucra en forma directa a más de 1600 empleados. Y de manera indirecta alrededor de media docena de proveedores de piezas e insumos. Por este motivo, la Serie 6.A de AGCO Allis es la de mayor porcentaje de integración de componentes argentinos. Estos tractores son fabricados en nuestro país por manos argentinas, que producen para la Argentina y para los mercados agrícolas más exigentes del mundo.
La transmisión de los tractores AGCO Allis, fabricada en la planta de Haedo, permite un óptimo aprovechamiento de la potencia en todas las tareas que la unidad realice. Además, provee una excelente relación peso-potencia que permite alcanzar una máxima adherencia de los neumáticos con mínima compactación.

En esta misma planta se produce la caja de velocidad para la Serie 6.A, totalmente sincronizada y diseñada para soportar un alto nivel de exigencia en el trabajo a campo. Ofrece también más de una velocidad para cada labor y condición de suelo. La lubricación forzada con aceite filtrado y enfriado incrementa la confiabilidad de componentes debido a que se logra una excelente lubricación de todos sus componentes. De esta manera el aceite logra conservar intactas sus características físico químicas, maximizando la vida útil de las transmisiones ante los requerimientos a las que se las somete.

2008: año de inversiones "Estaremos relocalizando en 2008 el resto de la línea que arranca de 60 y termina en los 125 caballos. Vamos a tener una línea muy completa con un programa que prevé superar los mil tractores", dijo Sendoya. "Claramente, los tractores que estamos trayendo a la Argentina bajo marcas Challenger o Massey Ferguson con la línea 6400 son de muy alta tecnología, que utilizan componentes desarrollados en Europa, como la transmisión variable (CVT) que representa un paso adelante del sistema Power Shift. Esa tecnología que está en las máquinas que estamos trayendo de Francia en un futuro no muy lejano va a ser incorporada a las máquinas que estamos produciendo en Brasil o ensambladas en la Argentina", comentó Sendoya.

El grupo AGCO en 2010 ensambló unos 650 tractores en el país, comercializados con la marca Agco Allis. Se trata de una línea tractores con potencias que varían entre 110 y 220 HP, con un grado de integración nacional que varía del 40 al 80%. Las trasmisiones y los ejes para estos tractores son provistos por la filial local de la italiana Carraro, desde su planta de Haedo.

Tractor número 3000 AGCO Allis anunció la fabricación del tractor n° 3000 en Noviembre de 2011. Bajó de la línea de montaje en Rosario el tractor AGCO Allis número 3000 que correspondió a una unidad del modelo 6.135 DT. Las fotos muestran la secuencia de armado en la última instancia de producción del tractor. Y la prueba ineludible del número de chasis.
Desde el 2006 nos venimos esforzando para producir más y mejor. Haber alcanzado este número es una muestra de que nuestros clientes siguen confiando en nosotros. Y de que todo el campo argentino sigue confiando en AGCO Allis Industria Argentina.

A fines de 2011, AGCO anunció la construcción de la planta de General Rodríguez, la cual alcanzará los 140 millones de dólares en 5 años; en ésta se incluye también desarrollo de proveedores, financiación a clientes y concesionarios. Así, la línea AGCO Allis fue trasladada por un muy corto tiempo a Gral Rodríguez, en la cual se dejó de producir, dándole paso a los primeros Valtra de origen nacional, junto con los Massey Ferguson.
Como se contempló la fabricación de tractores y motores, también la de cosechadoras: la primera será Massey Ferguson.

AGCO (Valtra - Challenger) fabricados en Argentina

AGCO ALLIS
AGCO Allis 6.110A
AGCO Allis 6.125A
AGCO Allis 6.135A
AGCO Allis 6.150A
AGCO Allis 6.175A
AGCO Allis 6.190A
AGCO Allis 6.220A

CHALLENGER
Challenger C660 / C670
Challenger 520C

VALTRA
Valtra BT150 / BT170
Valtra A990 Generación II
Valtra A 750 / A 850
Valtra E 600
Valtra E 500
Valtra AR 220
Valtra AR 175 / AR 190
Valtra AR 135 / AR 150


viernes, 17 de enero de 2014

Senor / Maag

Senor / GyR Senor / Grandes Máquinas Concepción del Uruguay S.A. /Maag

Juan y Emilio Senor se establecen allá por el año 1900 en San Vicente, provincia, de Santa Fe, con un taller de herrería dedicándose al arreglo de maquinas agrícolas y a la fabricación de carruajes de tracción a sangre. Posteriormente comienzan a trabajar en la trilla de cereales en parvas con trilladoras accionadas con motor a vapor, incentivo éste que los lleva, en 1920, a construir de su propio ingenio una maquina corta trilla de arrastre que es probada con éxito en la cosecha de trigo de ese año. Este resultado les permite en el año 1921 encarar la fabricación de este tipo de maquinarias con el nombre de Senor. Con esta marca reciben el merito de haber sido la primera fabrica sudamericana de cosechadoras que la consagro definitivamente en el agro por su fama y por la importante cantidad de unidades que a través de los años se fabricaban, contándose por millares. Se debe tener en cuenta que en los años 1960-1970 producían de 450 a 500 unidades al año de los modelos ya automotrices B3,J.E 40, J.E 50, además de otros implementos como recolectores de girasol y maíz contando con unos 700, obreros que trabajaban directa o indirectamente para la fabrica. En 1987 cerró sus puertas, pero fue recuperada años después en 1992 en Santa Fe mediante Gustavo y Rodolfo Senor que conformaron GyR SRL, la firma que tiene registrada la marca “Senor” al igual que el dominio de internet www.senor.com.ar

Senor Santa Fe se ocupó de despegarse de la firma uruguayense que explota la misma historia familiar que tienen en común e intentan aprovechar esos antecedentes para presentarse como una empresa sólida, cuando en rigor iniciaron sus actividades formalmente hace apenas un año, en febrero de 2011 según consta en AFIP.

Pero antes, en 2009, en un encuentro de trabajo concretado en Concepción del Uruguay, el gobernador Sergio Urribarri definió junto al empresario Ricardo Senor la radicación de la fábrica de cosechadoras de la firma Senor en esta ciudad entrerriana.
Esta marca legendaria, la de la primera cosechadora de la historia latinoamericana, estará en la provincia. “Entre Ríos es hoy la provincia con mayor empuje económico, con un gobernador que está promoviendo la radicación de empresas y la generación de trabajo, que mira al mediano y largo plazo y no sólo en la coyuntura. Entonces, eso hace que decidamos la radicación”, dijo el directivo de la centenaria empresa santafesina, Ricardo Senor.
“Este proyecto está en proceso desde febrero, en que venimos trabajando con la Secretaría de la Producción de la provincia, el municipio y el gobierno, y hoy fue el cierre para definir su instalación. Vinimos a hablar con el gobernador quien nos da todo su apoyo en los trámites que estamos haciendo para hacer factible la radicación en Concepción del Uruguay”, explicó el directivo.
Senor precisó que en principio la planta será para la fabricación de cosechadoras, pero adelantó que la idea para el futuro es producir también otras maquinarias como tractores y máquinas viales.
En la empresa metalúrgica “trabajarán en principio 22 operarios en forma directa, llegando al fin del primer año a 40 empleados, y a partir de que se vaya desarrollando comercialmente iremos tomando a más”, contó Senor, quien señaló además que se tercerizará toda la producción primaria en firmas locales, por lo que “va a haber también mano de obra indirecta”.
Dijo que la empresa se instalará en dos etapas. La primera que será en galpones alquilados en el puerto, y la segunda prevista para el año 2010 en que se construirá una planta en el parque industrial donde ya se ha reservado el predio. Agregó el empresario que la producción abastecerá al mercado interno en principio y externo en el futuro, y destacó la visita que hará presidente de Venezuela, Hugo Chávez, el próximo viernes a Entre Ríos “para poder establecer los vínculos comerciales que permitan venderle a ese país”.
El primer año tendrá una producción de 20 cosechadoras, lo cual se prevé ir aumentando en forma proporcional, año a año, dependiendo de la demanda del mercado.

Así en la actualidad, tenemos a Senor Santa Fe y a Grandes Máquinas Concepción del Uruguay S.A. que explota también el histórico nombre junto al de Maag para las cosechadoras. Paradoja del destino de una empresa pionera ahora dividida en dos y en diferentes provincias del país.



http://www.acercarweb.com.ar/cosechadoras.htm